Las lagunas empiezan a ganar terreno en la Pletera
Tres meses después de haberse iniciado las obras de desurbanización y restauración ambiental, la Pletera presenta una imagen completamente diferente, que ya nos permite hacernos una idea de cómo será el nuevo sistema de lagunas. Hasta el momento se han retirado más de 48.000 toneladas de material y sólo queda en pie un pequeño tramo del paseo marítimo y los viales de las diferentes islas urbanizadas. Se estima que en estos momentos se ha ejecutado un 40% de los trabajos de desurbanización, un porcentaje bastante elevado que se ha alcanzado, en buena medida, porque las condiciones climatológicas han sido muy favorables para la ejecución de la obra. La falta de precipitaciones ha permitido que la maquinaria pesada haya podido trabajar sin interrupciones, en un espacio muy sensible a las levante y en las lluvias. En estos momentos, el nivel freático se encuentra a niveles similares al de un mes de junio ordinario. Sin embargo, el agua ya está ocupando parte de los espacios donde antes estaba el paseo marítimo.
Durante estos tres meses, ya se han podido hacer tres de las cuatro lagunas que se han definido a lo largo del recorrido del antiguo paseo. Estas grandes balsas estarán interconectadas, aunque su régimen de inundabilidad será diferente, ya que unas seran permanentes y otras temporales. También tendrán un grado diferente de salinidad. Esta tipología varía en función de la cota a que se encuentra su base de la laguna. La más baja, a medio metro sobre el nivel del mar, corresponde a una gran laguna situada, aproximadamente, entre los puntos donde se situaban los dos giratorios del sector sur de la Pletera.
Una vez finalice la actuación en la parte del paseo, se pasará a retirar los viales y el material que se vertió en las parcelas donde se tenían que hacer las viviendas. En este sector también se adecuarán cuatro lagunas, que tendrán un carácter más temporal, aunque su inundabilidad también dependerá mucho del régimen de lluvias. Hasta este sector se dirigirán, a través de dos puntos, las aguas de escorrentía de la llanura agrícola.
Hoy, 2 de febrero, coincidiendo con el Día Mundial de los Humedales, hemos hecho balance de los tres primeros meses de obras y hemos organizado una visita de seguimiento con los medios de comunicación. Al acto han asistido la concejala de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Torroella de Montgrí, Sandra Bartomeus; el presidente y el director del Parque Natural, Narcís Coll y Marc Marí; y el director científico y la coordinadora ejecutiva del Life Pletera, Xavier Quintana y Ágata Colomer.
Bartomeus ha hecho una valoración muy positiva del ritmo de obra y de la calidad con que se están haciendo los trabajos, en un espacio tan sensible y frágil. La concejala de Medio Ambiente recuerda que la retirada del material acumulado en su día para poder cubrir la antigua marisma y hacer el paseo y la urbanización a finales de los 80, se está haciendo con mucho cuidado para no dañar el sustrato de la antigua marisma. En este sentido, ha querido agradecer la gran profesionalidad de los responsables y operarios de la obra, y especialmente de los maquinistas y del topógrafo que están interviniendo, ya que no es un trabajo fácil y un pequeño cambio de nivel, de pocos centímetros, en la cota de la marisma, puede tener una gran repercusión ambiental.
Paralelamente a las tareas de desurbanización, el Parque Natural, que también es socio del proyecto Life Pletera, continúa con las tareas de restauración del frente de dunas litoral.